22.4.11

acaban de comenzar las vacaciones de primavera. Dos semanas con el niño en el hogar. Algo me dice que mas vale me invente algun tour o terminamos mal. Ahora entiendo porque terminaban las clases en Diciembre y al lunes siguiente a nosotros a las 9 am nos depositaban en el club hasta las 6pm. No era para que aprendamos a nadar, era pa tirarle el bardo a otro. Ahora me caen todas las fichas...

11.4.11

FIREEEEEEEE!

La alarma contra incendio, con su muy ensordecedor piiii piiiii piii, suena a media noche. Suena ahi en el pasillo que separa a las habitaciones.
Sobresaltada -la adrenalina me sale por las orejas- me levanto a buscar al hijo para huir desesperadamente del hogar.
Paro.
Busco fuego. Nada.  Humo? nada. Huelo... nada. Sin marido (que se mudo al trabajo), con hijo llorando a los gritos, perro ladrando... la alarma sigue. 
Buscar una silla. No había una silla aca arriba? Ah si... esa cosa abajo de la montaña de ropa. Arrastro la silla. Me subo a la silla.  Reseteo la alarma.
Adonde esta el fuego??? No se huele nada. Subo al ático (lo cual en la oscuridad de la noche me da un poco de cuiqui). No hay fuego. No pasa nada (solo que hijo y yo estamos sordos corriendo por la casa en pijama a las 3am).

Que me avisa Doña alarma? adonde se quema la casa? porque suena asi?? Porque tenemos que tener alarma??

Cuando paro y pienso (eso de mantener la calma conmigo no va) lo veo a Seba. Tiene los ojos pegoteados e hinchados. Tiene conjuntivitis. Ahora entiendo que me decía (en holandés mezclado con la flema del llanto):" no puedo ver, no puedo ver buaaaaahh".

Es lo único que me aviso la alarma. El fuego está en los ojos del hijo.

3.4.11

Seba acaba de venir corriendo a comentarme que limpio tooooodo su baño. "Está re lindo" me dijo...
Sonriendo - nosotras madres siempre tenemos que sonreír a los ataques de voluntariosidad de nuestros pequeños- decía, sonriendo,pero carcomida por la desconfianza por dentro, me dirijo hacia el pequeño baño de mi hijuelo.
Efectivamente está todo limpio. No hay chorreaduras de dentífrico pegoteada a la bacha, ni papel higiénico en el piso para "secar" el pis que el no alcanzó a "meter en el inodoro" (que onda los hombres con esa falta de puntería... ni siquiera es cuestión de falta de experiencia infantil... esto se prolonga en la adultez! Apunten che!). Está todo acomodadito en el pequeño estante, tapitas puestas.
Me digo yo... éste no habrá usado algun detergente de esos para baños, no? Ya sabemos todos que esas tapitas "a prueba de niños" son una fantasía. Los primeros en poder "presionar y desenroscar" son los niños... especialmente si se trata de un frasco de penicilina gusto frutilla, o lavandina.
Pero... hay un olor fuerte a jabón de mano.
Me acerco y veo que el cepillo de dientes nuevo está muy colgadito en su lugar, pero con espuma. Lo huelo. No es espuma con olor a menta de dentífrico. Es espuma con olor a "aloe vera"...
El  vástago limpió todo el baño...con su cepillo de dientes. Esto podría ser un castigo de la colimba ponele...pero no, ésto el lo ha hecho de voluntad propia nomas...
Primer instinto, olerle la boca...
Madre al borde de un ataque de nervios: "te lavaste los dientes Seba?"
Hijo satisfecho: "no, todavía no. A ver... dame el cepillo!"
Llanto en el medio el porque él no entiende porque yo no apruebo ésta proeza de la higiene voluntaria.
No pequeño cavernícola. Vení que te explico.